Rompe el silencio: haz que tu pareja te escuche

¿Tu pareja ignora tus aportes y opiniones de manera constante? Si la respuesta es sí, entonces debes leer este artículo, que te será de mucha ayuda.

Erika Otero Romero

Algunas mujeres se han sentido frustradas por años debido a la falta de apoyo de sus parejas en sus proyectos personales. Para ejemplificar, les contaré la situación de Janeth.

Tras 40 años de matrimonio con Beto, Janeth ha soportado en silencio todas las decisiones que ha tomado su esposo, aunque él no la haya tenido en cuenta jamás para pedirle una opinión acerca de situaciones que la involucraban también a ella. Como si eso fuera poco, cada que ella planea hacer una renovación en su casa con el dinero que recibe de su propia pensión, tiene fuertes problemas con su esposo, ya que para él, Janeth no lo tiene en cuenta y él merece estar al tanto de ese tipo de decisiones, pues a él también le incumben.

Los hijos de Janeth han sido testigos mudos de este trato hacia su madre; cansados de esa situación, han optado por apoyarla para que al fin le ponga un alto a la actitud de su papá y la tenga en cuenta en la sociedad conyugal. Finalmente, un matrimonio no solo involucra afecto, sino tener en cuenta al otro como parte activa de la pareja.

El matrimonio: no solo afecto, también una sociedad

Cuando una pareja elige unir sus vidas, no solo lo hacen bajo el concepto de amarse por la eternidad, sino de apoyarse y tenerse en cuenta tanto para las decisiones pequeñas del diario vivir, como para situaciones más complejas.

Imagínate lo que es vivir con alguien que omite de manera reiterada lo que tú piensas o puedes aportar a la relación, o que dé por hecho que siempre contará con tu aprobación en lo que él decida. A pesar de que una situación debe ser bastante frustrante, por fortuna todo tiene solución en la vida marital. Esta es la razón por la cual planteo a continuación algunas de las posibles soluciones para evitar que esa situación se presente en tu matrimonio.

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1. No debes “ganarte un lugar”, pues ya lo tienes por derecho

No se trata de ganarse la oportunidad de opinar y hacer válidos tus puntos de vista, solo haz que tu pareja respete ese derecho tuyo y te tome en cuenta. Recuerda: es tu derecho adquirido desde el mismo día que firmaste tu acta de matrimonio.

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2. Opina, aunque no quiera escucharte

Y hazlo siempre, pues en algún momento tendrá que escucharte y tomarte en cuenta. También te recomiendo que le hagas saber cómo te hace sentir el hecho de que no te escuche, o pase por alto tus deseos y opiniones.

3. En caso extremo, permite que sienta lo mismo que tú

Aunque puede parecer excesivo, de vez en cuando puede ser útil que permitas situaciones en que él experimente la frustración que sientes. Si llegas a este punto, recuerda que no debes hacerlo en ánimo de venganza o revancha, pues solo lograrás incrementar el conflicto. La idea es que aproveches situaciones que le permitan saber y sentir en carne propia cómo te sientes tú cuando te hace menos y no te toma en cuenta en decisiones que también te incumben.

4. Si algo no te gusta, debes decirlo

Es posible que para evitarte problemas hayas aceptado de manera callada todo lo que tu pareja ha propuesto, pero es momento que cortes esa situación. Hazle saber que estar casados no hace que estés de acuerdo de forma automática con él, en todo lo que ha elegido. Déjale saber que tu opinión es diferente y que eso es precisamente lo que hace a una relación interesante.

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5. Habla claramente acerca de tus sentimientos

Por lo general, una pareja se acostumbra a que su cónyuge esté de acuerdo con él en todo, porque la otra parte jamás ha hecho sentir su opinión. Lo triste es que, para que esta conducta se arraigue, han tenido que pasar años de convivencia y tolerancia ciega. Pero como los cambios se dan de a poco, busca la manera de hablar con él y poner un límite a lo que tanto te incomoda.

Un matrimonio es como una pequeña barca que debe ser remada por dos personas, no solo por una muy hábil y otra que se deja llevar. Lucha por tu lugar; apoya pero también difiere cuando no estés de acuerdo. No será fácil, pero es tu derecho ser escuchada y tomada en cuenta.

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Erika Otero Romero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.