5 señales de que eres una persona tóxica

A veces es difícil identificar a las personas tóxicas. ¿Y si eres tú eres una de ellas? ¡Descúbrelo!

Adriana Acosta Bujan

Todos los días estamos expuestos a convivir con distintas personas, algunas nos iluminan el día con tan solo estar cerca de ellas. Pero otras, nos inundan el ambiente de emociones negativas, por ser manipuladores, egoístas, envidiosos, quejumbrosos; siempre andan buscando conflictos, aunque no existan motivos para tenerlos.

Seguramente ya conocerás a algunas de esas personas que su vibra energética es demasiada oscura y baja, que, con solo estar con ellos por un rato, son capaces de dañar a cualquiera; a estas personas las llámanos “tóxicas”.

Y sí, ya hemos hablado mucho de estas personas, de cómo son y de cómo evitarlas, pero la realidad es que muy pocas veces nos referimos a nosotros mismos, tal vez nosotros seamos las personas tóxicas, y no precisamente porque hagamos daño a los demás, sino a nosotros mismos.

Un enemigo oculto

Hay ocasiones en las que no es necesario defenderse de los demás para estar bien, ya que el enemigo puede ser uno mismo. Piénsalo de esta manera: nosotros somos capaces de destruirnos poco a poco, siendo tan tóxicos con nosotros que, sin estar consciente de ello, podríamos atentar contra nuestra vida.

Ahora bien, ¿cómo podemos ser tóxicos y lastimarnos solos? Aquí te comparto estas señales para que reflexiones sobre ello y así evites autodestruirte.

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1. Emociones reprimidas

La tristeza, la desesperanza, la desilusión, entre otras emociones negativas, pueden autodestruirnos. Podemos decir que somos tóxicos cuando permitimos que esas emociones nos hagan daño, ya que al no saberlas controlar corre riesgo nuestra propia vida.

Ahora bien, reprimir las emociones negativas, no solo nos afecta a nosotros, sino que también a las personas que están a nuestro alrededor, ya que estarás robándoles tranquilidad y bienestar a tus seres queridos, porque se preocuparán cuando tu salud física y mental decaigan, puesto que será inevitable.

Según la medicina tradicional China, las emociones reprimidas afectan ciertos órganos del cuerpo y sus funciones, por ello es que nos enfermamos. Por ejemplo, la tristeza se manifiesta en el cuerpo a través de enfermedades respiratorias y digestivas como la gripa o gastritis.

2. La vida ajena es interesante

Definitivamente, hay historias de vida increíbles, que merecen ser contadas, aplaudidas y reconocidas, puesto que muchas veces son relatos de heroísmo, valentía, milagros, fe, esperanza entre otros temas muy interesantes, que, al ser escuchadas nos ayudan a crecer espiritualmente, y a reflexionar sobre nuestra propia vida.

Sin embargo, podemos convertimos en personas tóxicas cuando nos dedicamos la mayor parte del tiempo en interesarnos más por la vida de otros, que en la de nosotros mismos. Tal vez, algunas personas lo hacen porque es más fácil dar opiniones, juzgar, criticar y aconsejar cuando la cosas no nos perjudican directamente.

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Ahora bien, para algunos, meterse en la vida ajena se vuelve su estilo de vida y sin darse cuenta se vuelven personas tóxicas, porque van descuidando la suya.

3. Eres determinante

“Se dice lo que digo y punto”; seguramente esta frase la habrás escuchado en alguna ocasión, porque hay personas que son tan necias, determinantes y mandonas que no dejan que los demás se expresen u opinen, ya que lo que él o ella diga se toma como una orden que todos tendrán que ejecutar, estén de acuerdo o no.

Tal vez, tú seas una persona tóxica si es que tienes este tipo de comportamientos, ya que sin darte cuenta estás lastimando a tus seres queridos, pues ellos también tienen derecho a expresarse libremente; recuerda que es importante dialogar para así llegar a acuerdos, sé flexible y aprende a escuchar a los demás.

4. Vivir en el pasado

Lamentablemente, hay personas que pasan su vida pensando en el pasado, dejando su presente al olvido. Esta acción y actitud puede llevarte a ser una persona tóxica, ya que estarás perjudicándote a ti misma.

Así que te recomiendo que comiences a pensar en ti, tomando las riendas de tu vida, es importante aprender a sanar las heridas del pasado, cerrando ciclos y visualizando un nuevo despertar. ¡No te hagas daño! ¡Vive el presente y agradece lo que la vida te ha regalado!

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5. No te amas

Es común que muchas veces nuestra vida entera la dedicamos para los que amamos, todo nuestro tiempo, nuestro dinero y esfuerzo; incluso somos capaces de dar la vida misma por el bienestar y felicidad de ellos.

Ahora bien, puede una persona convertirse en tóxica cuando no sabe ver por ella misma, es decir, no le da importancia en cubrir con sus necesidades, ya no tiene sueños, metas e ilusiones; por completo se ha olvidado de ella misma, ha dejado de amarse y descuidó su apariencia física y su bienestar emocional.

Ten en cuenta que nosotros mismo podemos ser esa persona tóxica, que no precisamente hace daño a los que nos rodean sino a nosotros mismos. Aprende a amarte como eres, vive el presente, sé una persona flexible, no te autodestruyas, ¡recuerda que solo tenemos una vida!

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Adriana Acosta Bujan

Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.