6 errores que los padres cometen cuando su hijo es tímido

"Controlar" la timidez de tu hijo puede acarrear graves consecuencias, evita estos errores.

Adriana Acosta Bujan

Es difícil percibir cuando nuestros hijos son tímidos, ya que aparentemente pensamos que son niños callados, tranquilos y bien portados. Para cualquier padre tener hijos así es una gran fortuna, pues no se tiene que lidiar castigándolos frecuentemente.

Sin embargo, como padres debemos poner atención a las señales que nos pueden indicar que nuestros hijos son tímidos, como por ejemplo:

  • Dificultades para relacionarse con otros
  • No exteriorizan sus problemas
  • Poca participación en las clases del colegio
  • Aislamiento y evitación de actividades
  • Carga emocional, se muestra a la defensiva
  • Ansiedad

El doctor Jerome Kagan en sus estudios comprobó que la timidez puede generarse desde la infancia, o bien, aparecer en la adultez tras haber experimentado una situación traumática. Cabe mencionar que en ambos casos cuando el entorno es favorable, la timidez desaparece.

Errores comunes de los padres

Es importante ayudar a nuestros hijos cuando son tímidos, ya que desde que son muy pequeños ellos necesitan interactuar con los demás para poderse formar su personalidad y desarrollar sus habilidades; de lo contrario, la timidez puede desencadenar fobias sociales, depresión, ansiedad y otras patologías psicológicas.

¿Qué debes saber?

1. No lo obligues

Los padres queremos que nuestros hijos tengan muchos amigos, que se diviertan y sean felices, sin embargo, uno de los errores que cometemos los padres es obligarlos a relacionarse con otros, empleando estrategias como castigos o burlas para lograr que ellos tengan compañía.

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El problema es que obligarlos a relacionarse con otros puede desencadenarles fobia social y ansiedad. Será conveniente dejarlos ser libremente como son. Una opción es que tus hijos vean cómo tú te relacionas y así ser un ejemplo para ellos.

2. Compararlos

Desafortunadamente, algunos padres suelen comparar a sus hijos con otros hermanos, amigos, sobrinos etcétera. Exhibir que son tímidos y decir que no saben relacionarse con otros porque son tontos o antisociables sería un grave error.

Estarás fomentando en ellos inseguridades, poco amor propio, baja autoestima y desconfianza en ellos mismos y en lo que hacen. Recuerda que cuando son pequeños los niños son muy propensos a pensar que no los amas, y que tienen que ganarse tu amor de cualquier otra manera; eso los lastimaría profundamente dejándoles heridas irreparables.

3. Respondes en su lugar

Muchas veces los padres por evitar vergüenza solemos responder por nuestros hijos. Un ejemplo frecuente y sencillo es cuando una persona le pregunta su nombre o su edad y el niño no responde, entonces lo hacemos en lugar de ellos.

Si tus hijos no quieren responder debes dejar las cosas así, no respondas por ellos. Poco a poco ganarán más confianza en el lugar donde se encuentren y la timidez menguará. En estos casos lo conveniente será no enfocar tu atención en tus hijos y seguir interactuando con los demás, sin demostrar mucho interés o preocupación.

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4. No reconocer su esfuerzo

Tal vez lo veas muy normal que tus hijos por fin se atrevieron a hablar con un amiguito y se te olvide de repente felicitarlo. Sin embargo, recuerda que tu felicitación es importante para ellos, ya que tendrán más seguridad y confianza en sí mismos.

Valora cada esfuerzo y recompénsalo, hazlos sentir amados, apreciados e importantes; de esa manera la timidez irá desapareciendo, porque lo que desean tus hijos es agradarte, además que se darán cuenta que es más divertido jugar con alguien que en soledad.

Anima a tu hijo a que haga amigos, pero sin presionar.

5. Muchas actividades

Llenar los días del calendario con millones de actividades físicas y recreativas para que hagan sus hijos es un error frecuente que cometen los padres, ya que los estarás orillando a sentirse estresados, frustrados e incómodos, y en el peor escenario desarrollarán fobia social.

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Deja que tus hijos realicen las actividades que les llame la atención, para que las disfruten al máximo y así pueden explotar sus habilidades y destrezas; de lo contrario estarás haciendo un mal en lugar de un bien.

6. No hables de ellos

Si vas a una reunión familiar, a una fiesta, a un evento escolar o en cualquier otro lugar con tus hijos, evita decirles a las personas que tus hijos son tímidos, ya que los estarás avergonzando sin tener la necesidad de que los demás lo sepan. Si tú lo haces, entonces todo el mundo pondrá su atención en ellos y se sentirán observados, atemorizados e inseguros.

Recuerda que la timidez se irá desapareciendo cuando tus hijos es encuentren en ambientes seguros, tranquilos y armónicos. Motívalos recompensando sus logros y su esfuerzo cada vez que se muestren extrovertidos.

 Ten en mente que sí no te percatas de algún avance, será conveniente acudir con un especialista para que tus hijos logren mejorar sus relaciones sociales, tener más confianza en ellos mismos y amor propio. La timidez es un problema que se puede sanar con mucho amor y empatía; así que te recomiendo evitar estos errores.

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Adriana Acosta Bujan

Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.