Ahorra mientras te diviertes en el cine

Una de las actividades familiares más comunes es ir al cine. Allí puedes ahorrar al mismo tiempo que te diviertes.

Arturo Leonardo

¿Te gusta ir al cine? Es una actividad familiar muy recomendable, sirve para reducir el estrés del día a día, ejercita la imaginación (muy importante en niños), y desarrolla la actividad reflexiva, además de que es una actividad deliciosa con esas palomitas especiales.

Pero hay que ser realistas, ir al cine cuesta dinero y para familias que apenas pueden solventar los gastos primarios (comida, ropa, etcétera), ir a una sala de cine resulta un verdadero lujo.

No todo está perdido: resulta que si se planea de forma adecuada, es posible ahorrar al ir al cine; revisa bien de qué manera, así tus hijos y tu cartera te lo van a agradecer durante más de una quincena.

Divertirse ahorrando: la magia del cine

1. Haz un presupuesto previo

Lo primero que se tiene que considerar para buscar ahorrar, es presupuestar la salida. Si bien las sorpresas ayudan de forma importante a romper la rutina, hacer un presupuesto para este tipo de casos te apoyará para que no gastes un dinero que en dos días suplicarás por tener de vuelta.

Al hacer presupuestos te darás cuenta del promedio de tu gasto en el cine y podrás trabajar para mejorarlo o hacerlo más grande. Incluso puedes apuntar en qué cines te cobran más y no te tomarán desprevenido cuando quieras invitar a tu suegra y cuñados.

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2. Promociones

Otra cosa que debes de considerar para ahorrar mientras vas al cine, es verdaderamente usar las promociones, llámense tarjetas de lealtad, descuentos en boletos o dulcería. Para eso están las promociones, no seas de las personas que se “sienten mal” al utilizarlas (en serio: conocí a alguien que decía que le daba penar usar descuentos porque pensarían que era pobre).

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3. Come bien antes de ir al cine

Pasamos entonces a la siguiente recomendación. Es mejor que antes de ir al cine comas y así no buscarás saciar el hambre con palomitas de dos kilos, que dicho sea de paso, lo sé, son irresistibles. Aquí agregaría algo: tú pagas por entrar a ver la película, no por el derecho a comprar en la dulcería. Realmente no pasa nada si llevas tu botana desde tu casa, con lo que seguro te ahorrarás también un dinero considerable.

4. Evita asistir los fines de semana

Por último, en la medida de lo posible, trata de asistir entre semana y no los sábados o domingos. Entiendo que en muchos de los casos son los únicos días que tienes libres, pero también es cuando se aumentan algunos precios, precisamente por esa odiosa ley de la oferta y la demanda. Entre semana las empresas dedicadas al cine tratan de incentivar que la gente vaya, por lo cual promueven, de nuevo, ciertas ofertas que si las revisas te van a convenir.

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Así que ya sabes, puedes hacer de una actividad familiar algo que te convenga y que no termine por aniquilar tu salario.

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Arturo Leonardo

Comunicador fanático de sus hijos a quienes les relata día a día sus aventuras de música y deportes, gusta de leer lo que se cruce en su camino, piensa que el acto más revolucionario que puede existir es el de reír.