¿Amas o te aman “demasiado”? Podría tratarse de este trastorno

Reconoce si es amor o un trastorno y aprende a amar.

Adriana Acosta Bujan

“Nuestra relación marchaba de maravilla, hasta que un buen día mi esposo enloqueció por completo, me gritaba hasta el cansancio que lo engañaba con alguien más, me revisaba el celular y hasta iba a mi trabajo para observarme. Por fortuna, lo abandone”, dijo Lucía.

“A los pocos días de salir con ella, me di cuenta que su amor se convirtió en una obsesión, no dejaba de mandarme mensajes ni de llamarme, todo el día estaba stalkeando mis redes sociales, incluso creo que la llegué a ver un par de ocasiones afuera de mi negocio; terminé abandonándola”, dijo Héctor.

“No, no lo hagas por favor. Esas fueron mis palabras cuando mi esposo me dijo que se iba a suicidar porque según él, yo no lo amaba. Me asusté tanto que decidimos asistir a terapia de pareja, sin embargo, él no quiso continuar y un buen día se quitó la vida”, dijo Mariam, con lágrimas en sus ojos.

Muchas historias de amor como estas podemos escuchar todos los días, que alguien engañó a su pareja, que el novio mató a los amigos de la novia por celos, que ya no existe confianza en las parejas, etcétera.

Tal vez nos sorprenda un poco porque podemos ser críticos y curiosos, sin embargo, algunas veces existe una causa y razón profunda que hace que las personas actúen de esa manera. Max Weber, en su teoría comprensiva explica que se debe estudiar el comportamiento individual para así conocer las acciones que una persona realiza en sociedad.  

Es decir, conocer a detalle la historia de vida de las personas nos hará comprender muchas cosas de su comportamiento. Puesto que algunas veces, en temas del amor, no solo el problema podría tratase de apego emocional, sino que pudiese ser alguna enfermedad.

¿Amas o te aman demasiado?

Dorothy Tennov en su libro titulado “Amor y limerencia: la experiencia de estar enamorado”, explica que la limerencia es un trastorno el cual una persona ama de manera obsesiva a otra. Los psicólogos le llaman “Trastorno obsesivo compulsivo enfocado al amor”, que se caracteriza por aparecer de manera involuntaria, teniendo pensamientos obsesivos frecuentes y sentir una gran necesitad de ser correspondidos.

¿Es amor o es limerencia?

1. Limerencia

Las personas que sufren limerencia suelen tener pensamientos obsesivos compulsivos repetidamente, es decir, tienen miedos y fantasías no deseadas, que provocan un gran sufrimiento emocional y ansiedad. Ellos están necesitados de amor y desean a como dé lugar sentirse amados, por eso es que al encontrar a alguien se obsesionan.

Se caracterizan por ser personas celosas, intensas, imaginativas (fantasean), sienten la obsesión por estar las 24 horas del día con su ser amado, tienen bajo nivel de autoestima, seguridad y confianza, suelen mentir, idealizar, se hacen las víctimas y son chantajistas.

Todo el tiempo están buscando encontrar algo de su ser amado, es decir, por eso stalkean, vigilan, llaman y acosan. Tienen presentan algunos síntomas físicos que son perceptibles a simple vista como: sudoración, temblores, tartamudeo, ansiedad, estrés.

Realmente las personas sufren demasiado, no solo en el amor, sino porque son afectadas todas las áreas de su vida (trabajo, familia, amigos).

2. Amor

Como decía mi papá, “quien ama no lastima”. Esta frase es muy cierta, ya que amar a alguien no debe de causar dolor ni sufrimiento, al contrario, debe de alegrar, provocar seguridad, estabilidad y protección.

Ahora bien, amar es un sentimiento complejo y subjetivo, que no siempre se puede interpretar de la misma manera, porque habrá quienes piensen que amar es celar, sacrificar, pertenecer, y otras que piensen que amar es libertad, compartir, tener sueños en común, entre otras cosas.

Haciendo una comparación con el trastorno “limerencia” y el amor, aquí podremos interpretar que en el amor verdadero no existen los celos enfermizos, ni sacrificios, no hay inseguridades, dudas, ni infidelidades, sino más bien hay libertad de expresión, compromiso, respeto, admiración.

Tratamiento

Este trastorno realmente puede ser una pesadilla para quien lo padece, por lo que se recomienda tener una terapia para lograr sanar. Aunado a esa terapia también puedes comenzar con trabajar con el amor propio.

Concéntrate en ti mismo, sana tu mente y tu cuerpo, ponlos en armonía y equilibrio. Recuerda el poder que tienen las afirmaciones, ya que son de gran ayuda para que nuestro cerebro comience a transformar una nueva realidad.

Reconoce tus emociones negativas y educa a tu cerebro para que no te afecten, será un paso super importante para sanar. Piénsalo de esta manera: una persona que fue abandonada, que sufrió violencia desde su infancia, es probable que al creer, busque llenar esa carencia afectiva y al tenerla, no quiera soltarla, hasta convertirse en una obsesión.

Ya sabes reconocer las características y síntomas de la limerencia y las diferencias con el amor verdadero. Ahora pregúntate, ¿Sabes amar?

Adriana Acosta Bujan

Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.