Cómo hablar con los hijos cuando un padre ausente regresa al hogar

Cuando un padre decide volver al hogar, es prudente que los hijos sacien sus preguntas e inquietudes. ¿Cómo volver a retomar la familia?

Emma E. Sánchez

Dicen que lo único constante en esta vida es el cambio; y es cierto. Todo a nuestro alrededor cambia constantemente y se transforma, unas veces rápido y otras muy lentamente. Nosotros, nuestras vidas y nuestras relaciones personales también cambian con frecuencia y todos debemos ser sumamente respetuosos y considerados ante estos cambios, en la propia familia y en la de quienes nos rodean.

¿Por qué digo esto? Porque las relaciones de pareja a veces son cambiantes y una intromisión o imprudencia de alguien externo a la pareja puede causar daños emocionales que pueden afectar a los más vulnerables o pequeños.

Padres que van y vienen

Uno de los cambios que una familia experimenta, desafortunadamente hoy en día,  con mayor frecuencia es el aparecer y desaparecer del padre. Algunas razones por las que esto ocurre pueden ser desde algo positivo para la familia, como el trabajo, pasando por problemas conyugales, y hasta el abandono.

Si el padre sale de manera inesperada o abandona el hogar familiar, la madre es la que ofrece algún tipo de “explicación” a los hijos, y normalmente ellos creerán todo lo que su mamá les diga. Las palabras que ella diga o “su versión de la historia” será vital para el entendimiento de los hijos de lo que sucedió, y el por qué él no está presente; pero sobre todo para crear una imagen sana del motivo por el que se fue; por  el bien de los hijos y para que no genere un profundo resentimiento que los traumatice y provoque rencor para el resto de sus vidas.

Los problemas  emocionales de los hijos vienen cuando la versión de la madre se contradice contra las acciones del padre, o si este va y viene con frecuencia a la casa creando incertidumbre en los hijos y la relación entre padres es agresiva u hostil.

Advertisement

Si estás atravesando algo así, y el padre de tus hijos por alguna razón se fue y hoy quiere regresar, antes de decir nada, considera estas ideas:

El padre que se ausenta por periodos largos por trabajo

Si tu esposo debido a su trabajo pasa mucho tiempo fuera de casa es muy importante que busquen juntos todas las maneras posibles para que los niños puedan “ver” a su padre con frecuencia y fortalecer su relación. Apóyate de la tecnología y hagan un esfuerzo por verse, reunirse y disfrutar tiempos juntos.

Un niño necesita a sus padres, él puede entender que papá viaje o tarde en regresar a casa por trabajo si ve que su madre lo recibe llena de alegría y gusto. Si el hijo ve que ella ama a ese hombre  y que a su llegada él la ama tanto o más, el niño también dispondrá su corazón para amar y ser amado, pero si hay incongruencias en su percepción del amor, la semilla de la incertidumbre o la duda se sembrará en su corazón.

Siempre será mejor decir y vivir una verdad que una falsa felicidad.

Padres que trabajan para la milicia, en lugares peligrosos

En casos de este tipo, no se trata solo  del regreso del padre al hogar, sino de su reintegración a la familia tras un tiempo en combate y especialmente si ha sufrido lesiones, requiere rehabilitación o terapia psicológica.

Advertisement

En este tipo de casos, los hijos también requieren explicaciones lógicas y coherentes sobre lo que ha vivido su padre para entonces poder comprenderlo y re integrarlo a la vida familiar, que por cierto ha estado funcionando sin él.

Padres que han tomado malas decisiones en la vida

Algo similar ocurre con los padres que por algunas malas decisiones estuvieron presos o  en clínicas de desintoxicación. Son procesos muy fuertes y serios que la esposa ha tenido que vivir y solo ella sabe cómo fueron las cosas y sus consecuencias.

Hace un tiempo tuve como jefa a una mujer muy trabajadora, hermosa y eficiente, yo durante años pensé que era madre soltera pero un día ella me avisó que no vendría a trabajar una semana pues su esposo regresaría a casa y deseaba recibirlo y pasar algún tiempo con él. Entonces ella me explicó que su esposo tras varios años de haber estado preso, finalmente regresaba a casa y quería reconstruir su hogar.

Esa familia pasó una prueba tremenda y fue el amor, la buena voluntad y el perdón los ingredientes que lograron conservar una buena  familia.  Hace poco vi a la hija de esa compañera de trabajo convertida en una mujer tan hermosa como su madre; al platicar sobre el pasado, ella dijo algo muy importante “Mi madre fue muy valiente y gracias a su fe en mi padre yo pude criarme en una familia, no puedo recordar que me faltara mi padre, ella se encargó de hacer una infancia feliz para mi”

Padres “confundidos” o que necesitan “tiempo”

Este tipo de hombre o de esposo es un verdadero dolor de cabeza para muchas mujeres, pues ante el menor cambio o desafío de vida, su primera reacción es correr,escaparse, y esconderse hasta que puede pensar y regresar a enfrentar los problemas.

Advertisement

Hay otros que acostumbran pedir “tiempo”para pensar, y simplemente se van para nunca jamás regresar. O aquellos que tienen otra familia y desean ir y venir entre amabas relaciones.

Estos padres hacen mucho daño a la estabilidad de los hijos.  El ir y venir frecuente ya es en sí complejo y lo que causa más deterioro en la formación de los pequeños, es el mal trato o abuso emocional que la madre vive.  Cualquier mujer debe considerar concienzudamente esta situación, y buscar ayuda si así se requiere.

Padres arrepentidos

Todos hemos cometido errores y el arrepentimiento  es real y posible. A veces hay ocasiones que los hombres vuelven atrás la mirada y regresan para buscar recuperar sinceramente a la familia que perdieron por sus malas decisiones; y tras algún tiempo reconocen sus errores y buscan enmendarlos sinceramente.

Hay muchas historias de familias que  habiendo estado rotas y separadas, con  mucho esfuerzo pudieron volver a integrarse y que hoy en día están juntos, fuertes y felices.

Perdonar y corresponder al perdón dado es posible. Todo esfuerzo por nuestra familia siempre es recompensado, y el intentarlo nos libera de la tristeza de pensar “lo hubiera intentado”,  dejándonos en paz y con la conciencia tranquila para tomar más y mejores decisiones.

Advertisement

Haz lo que esté a tu alcance, y más, y jamás te arrepentirás.

Toma un momento para compartir ...

Emma E. Sánchez

Pedagoga y Terapista familiar y de pareja. Casada y madre de tres hijas adultas. Enamorada de la Educación y la Literatura. Escribir sobre los temas familiares para ayudar a otros es mi mejor experiencia de vida.