Famoso cardiólogo revela increíbles ventajas de amar a tu pareja pensando en la eternidad

¿Porque amar hasta que la muerte los separe no es lo mejor para que tu pareja funcione?

Mariel Reimann

Desde niña siempre disfrutaba de ver las bodas en la catedral de la iglesia católica de mi ciudad natal. Ver las novias vestidas de blanco, las flores, los invitados y el amor de sus futuros esposos esperando por ellas en el altar, tenía algo mágico; las bodas siempre parecían surrealistas, como robadas de la mejor historia de Disney.

“Hasta que la muerte los separe”

Sin embargo, el hecho de que todo ese amor se jurara sólo hasta que la muerte los separara, parecía inevitablemente, romper con el encanto y la fantasía de un amor para siempre, como en los cuentos de hadas.

Una unión por la eternidad

Advertisement

El cardiólogo y cirujano, Russell M. Nelson, compartió en una conferencia uno de los ejemplos más ilustrativos que ayudó a miles de parejas a repensar el amor que se tienen y el tipo de unión que buscan:

“Yo lo llamo ‘patrones del comprador’”, explicó Nelson. “Como las compras son parte de nuestra vida diaria, estos patrones pueden resultar familiares”, agregó.

“Los compradores sabios estudian a fondo sus opciones antes de hacer una selección. Se centran principalmente en la calidad y la durabilidad de un producto deseado. Ellos quieren lo mejor. En contraste, algunos compradores buscan gangas, y otros se arriesgan a derrochar, solo para aprender más tarde, y para su consternación, que su elección no duró el tiempo que pensaban que iba a durar. Y, lamentablemente, hay personas raras que dejan de lado su integridad personal y roban lo que quieren. Los llamamos ladrones”.

“Los patrones del comprador pueden aplicarse al tema del matrimonio. Una pareja enamorada puede elegir un matrimonio de la más alta calidad o uno de menor calidad que no perdure. O pueden no elegir ninguno y robar descaradamente lo que quieren como ‘ladrones maritales”.

¿Un matrimonio por un rato, hasta que la muerte nos separe o por la eternidad?

Advertisement

Encontrar a esa persona adecuada, a esa persona que más allá de atraernos, de gustarnos, y de hacernos sentir bien, nos llena el alma, porque simplemente comparte nuestros mismos valores, nuestras metas, nuestra misma percepción de la vida, es como haber analizado eso que nos quita el sueño y que queremos tener en nuestras vidas, pero no sólo hasta que su garantía se acabe, sino por siempre.

“El tema del matrimonio se debate en todo el mundo, donde existen diversos acuerdos para la vida conyugal. Mi propósito al hablar sobre este tema es declarar, que el matrimonio entre un hombre y una mujer es sagrado; está ordenado por Dios. También afirmo la virtud de un matrimonio en el templo. Es el tipo de matrimonio más elevado y duradero que nuestro Creador puede ofrecer a sus hijos”, explica Nelson en este mensaje que ha inspirado a miles de parejas y personas solteras buscando esa persona con quien compartir sus vidas.

El matrimonio, una unión que necesita la bendición de Dios

Advertisement

El Dr. Nelson, además de ser un eminente cardiólogo, es un querido líder religioso, y recientemente ha conducido una gira por varios países latinoamericanos dedicando Templos, lugares especialmente dedicados para que los miembros de su misma fe celebren ordenanzas sagradas con la promesa de casarse por la eternidad para así lograr tener familias eternas.

Algunas estadísticas señalan que cada vez menos parejas eligen casarse religiosamente. Según los datos aportados por una de las páginas webs líderes en bodas, el número de parejas que contraen nupcias sin incluir su fe ha aumentado en un 41% en los últimos años; el número de divorcios, también lo ha hecho.

“La proclamación sobre la familia nos ayuda a darnos cuenta de que el matrimonio celestial ofrece mayores posibilidades de felicidad si la comparamos a cualquier otro tipo de relación”, explica el Dr. Nelson en uno de sus mensajes.

Un estudio conducido por Family Studies, que entrevistó a más de 1600 adultos, llegó a la conclusión de que el 78 por ciento de las parejas que asisten juntas a la iglesia informaron estar “muy felices” o “extremadamente felices” con su relación. A su vez, cuando se trata de la participación de una pareja en actividades religiosas, los investigadores encontraron que el predictor más fuerte de la satisfacción de la relación era la oración compartida. Las parejas que informaron que rezaban juntas con frecuencia (aproximadamente una vez por semana o más a menudo) tenían un 17% más de probabilidades de decir que eran muy felices juntas que las parejas que rezan juntas con menos frecuencia.

Advertisement

Casarnos por la eternidad

El último Templo dedicado por el líder religioso de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Russell M. Nelson, fue en la ciudad de Concepción en el país de Chile. El imponente y bello edificio que sostuvo una casa abierta para todas las personas que quisieran conocerlo antes de ser dedicado para que sólo los miembros fieles de dicha fe puedan utilizarlo, ha causado una gran algarabía entre miembros y no miembros.

El concepto de eternidad, da a los matrimonios y a las familias una percepción más profunda de lo que el casamiento en sí significa. Al quitar la “temporalidad” del convenio matrimonial, las personas se predisponen a trabajar más duro y con más convicción. Al igual que lo explicaba el Dr. Nelson en su mensaje comparando el comportamiento de los compradores al comportamiento de quienes están casados o por hacerlo;  aquellos que estudian mejor el producto que desean ‘comprar’ y esperan una duración ‘permanente o más duradera’, son quienes apuestan por lo mejor, o el mejor tipo de matrimonio, el matrimonio eterno.

Advertisement

Independientemente de la fe que practiques, creer en Dios y hacer de Dios parte de tu matrimonio y de tu familia trae más bendiciones, sentimiento de felicidad, y ganas de seguir hacia adelante como pareja, como familia.

Toma un momento para compartir ...

Mariel Reimann

Mariel Reimann estudió leyes en la Universidad de Córdoba, Argentina y vive en Salt Lake City, Utah. Es madre de dos hijas que son la luz de su vida.