Mantener a la familia llena de buenos principios

"Cada hogar es diferente, pero todo hogar en el que siquiera uno solo de sus miembros procure la verdad, puede marcar la diferencia". Cheryl A. Esplin

Emma E. Sánchez

Seguramente en alguna ocasión has comprimido una lata de refresco vacía, una vez terminada tu gaseosa, es fácil ¿verdad? ¿Lo has intentado cuando aún contiene tu bebida? ¡Es imposible reducirla cuando está llena! Bueno, pues lo mismo sucede con nuestras familias.

Cuando nuestra familia es débil, carente de principios correctos o “vacía” espiritualmente, cualquier dificultad puede destruirla fácilmente. Pero, ¿cómo llenar nuestra familia de buenos principios? El alemán Dieter Uchdorf, ex piloto de aviación, dijo: “Dios se interesa por ustedes. Él escuchará y responderá sus preguntas personales. Las respuestas a sus oraciones vendrán a la manera de Él y en Su propio tiempo, por lo tanto, necesitan aprender a escuchar Su voz”. Así, me permito recomendarte que observes con atención a tu familia y determines qué cosas necesitan para ser fortalecidos; yo te comparto algunas de las cosas que considero más importantes para lograr esa fortaleza.

La oración familiar

Una de las cosas más hermosas que un hijo puede disfrutar, es escuchar a sus padres orar. Cuando un hijo escucha a su padre o madre pedir con sinceridad por el bien de él y sus hermanos, su corazón se enternece y los malos sentimientos poco a poco se van haciendo menos. Si tienes algún conflicto en casa con la conducta de tus pequeños o la rebeldía de los adolescentes, la oración es el máximo principio de fortaleza y paz para una familia. Orar juntos una vez al día como familia, es un hábito que te brindará grandes satisfacciones.

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Estudio de las escrituras y libros inspiradores

Leer la palabra de Dios de manera personal y con los hijos, puede hacer maravillas en el hogar. Evita el aburrir a los niños obligándolos a leer o estudiar las escrituras y otros libros, mejor construye un momento agradable en familia, lleno de afecto e interés legítimo por aprender a cómo mejorar y dirigir nuestras vidas de mejor manera.

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El amor y el servicio entre miembros de la familia

Si hay un aceite lubricante para las relaciones familiares, es el servicio entre unos y otros. Cuando buscamos hacer más cómodo o llevadero el día a alguien más, o sorprenderlo con algo que le agrada, todo es más fácil.

Las reuniones familiares para ponerse de acuerdo, aprender o fortalecer a algún miembro de la familia

Si regularmente acostumbras tener reuniones familiares o encuentros personales con cada uno de tus hijos, seguramente estarás llenando a tu familia de seguridad y confianza. Una familia que platica y se reúne para organizarse, resolver problemas e instruirse, tiene muchas más posibilidades de superar juntos las dificultades que la vida les presente.

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Cada familia es diferente y cada una tiene necesidades particulares, pide a Dios para saber cómo fortalecer a tu familia, Él siempre te dará la mejor de las respuestas.

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Emma E. Sánchez

Pedagoga y Terapista familiar y de pareja. Casada y madre de tres hijas adultas. Enamorada de la Educación y la Literatura. Escribir sobre los temas familiares para ayudar a otros es mi mejor experiencia de vida.