Niños menos caprichosos y más humildes

Vivimos en un mundo materialista; sin embargo, puedes evitar que tus hijos se vuelvan caprichosos y consentidos con unos sencillos consejos.

Lizette Morante

Creo que no hay duda de que todos haríamos hasta lo imposible porque a nuestros seres queridos no les faltara nada en lo que toca al amor, los cuidados, la protección o estabilidad económica; sobre todo cuando se trata de quienes tienen hijos. Este sentimiento de complacencia se agudiza cuando nosotros tuvimos carencias de algún tipo y queremos evitar, en la medida de lo posible, que los pequeños sufran lo mismo.

Por ejemplo, recuerdo que cuando era niña, mi mamá, mi hermana y yo teníamos que recorrer largos trayectos en transporte público para ir de la casa a la escuela y de regreso; era realmente algo muy pesado, sobre todo si llovía, hacía mucho calor o era ya de noche. Cuando crecí me prometí que cuando llegara el momento de tener hijos buscaría el modo de que no pasaran por lo mismo, y procuraría tener un automóvil para que no se cansaran en los trayectos. Sin embargo, esta experiencia también me ayudó a entender que las cosas no son fáciles de obtener, sino que todo requiere tiempo y esfuerzo.

Por eso es importante que los niños sepan que no todo es gratis, y aquí hay algunas formas de darles esta lección que, además de enseñarles a ahorrar y a valorar el trabajo, los hará menos caprichosos y entenderán lo que es la humildad.

1. Aprende a decir no

Los niños siempre quieren que se les compre todo lo que ven a su paso: dulces, juguetes, globos, comida; lo que sea que les llame la atención. Sin embargo, debes mantenerte firme y aunque en alguna ocasión puedas premiarlos por su buen comportamiento u óptimas calificaciones, no quiere decir que debas cumplir todos y cada uno de sus caprichos. Esto les ayudará a saber que las cosas buenas tienen recompensa y a elegir sus prioridades.

2. Trabajo remunerado

No se trata de fomentar la explotación infantil ni mucho menos, sino de hacerles saber, desde pequeños, que obtener diversos gustos, cuesta. Así que una buena idea es asignarles tareas sencillas de acuerdo con su edad y recompensarlos por su trabajo. Es decir, pueden ayudarte a lavar el coche, a los quehaceres de la casa, a sacar la basura o cumplir con deberes menores que puedes premiar con una golosina, dejando que elijan una actividad para el fin de semana, un regalo o quizá una moneda que puedan ahorrar para comprarse algo por su propia cuenta.

3. La importancia del ahorro

Es importante que aprendan desde pequeños a tener una cultura del ahorro. Si sueles darles mesada o dinero como regalo de cumpleaños, enséñales que no todo lo deben gastar en dos segundos, ya que si después ven un juguete que les guste, necesitarán juntar dinero poco a poco. Si desde chicos aprenden a ahorrar, adoptarán este hábito y en la adultez podrán llevar sus finanzas de una manera muy prudente; podrán asimismo ser más independientes y valorarán sus pertenencias, porque saben el trabajo que les costó obtenerlas.

4. El que parte y comparte…

Fomenta en tus hijos el concepto de caridad. Un ejemplo puede ser que donen los juguetes y la ropa que no usen a niños necesitados, o llévalos a dar víveres cuando se presente alguna tragedia en tu comunidad. Esto les ayudará a saber desprenderse de las cosas materiales y a saber que el dinero no es lo más importante en la vida; aprenderán también a compartir o a ayudar cuando alguien lo necesite.

Lizette Morante

Lizette Morante es mexicana y egresada de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García. Entre sus pasatiempos están leer, escribir, los deportes y disfruta mucho estar con su familia y su perro.