No pasa un día sin que extrañe a mi abuela. Y hubo cinco cosas más que pude haber hecho con ella

Hay gente que piensa que visitar a los abuelos puede ser aburrido. Aquí te presento cinco actividades que te acercarán a ellos y renovarán el amor por tus ancestros.

Maia Fernandez

Hace ya casi cuatro años que mi abuela nos dejó. Era muy unida a mí. Yo fui su primera nieta, y nos encantaba charlar y escuchar música. Ella era una gran cocinera y pintora. Me enseñó algunos de sus secretos de cocina y compartía conmigo los avances en sus cuadros, o el boceto de su próxima pintura. A medida que envejecía ya no pudo pintar más, sus manos no le respondían como ella deseaba. Esto la deprimía y frustraba. Y al perder la memoria ya no cocinó más. Es decir, dejó de hacer las dos actividades que más amaba.

Para tratar de combatir su tristeza por esa razón, mi madre, mis hermanos y yo tratábamos de incentivarla a hacer otras actividades que la entretuvieran, que se sintiera útil, necesitada y valorada. Si estás en una situación similar, estos cinco puntos te serán de utilidad:

  1. Pídanle consejo. No hay nada que haga sentir más valiosa a una persona que el hecho de que alguien se acerque a pedirle consejo, y más si se trata de su nieto. Cuéntale de tu vida y pregúntale su opinión, o qué haría en determinada situación. Se sentirá útil y feliz de pasar un rato contigo.
  2. Escuchen música. Al estar mi abuela en su lecho de muerte recuerdo que mi hermano y yo le cantábamos boleros. Fue un momento único, pero muy triste. Como ya no hablaba, la música fue nuestro medio de comunicación. Si tu abuelo no está todavía en esa situación crucial, pregúntale cuál es su música favorita y escúchala con él. Pídele que te cuente cómo se bailaba en su época, qué ropa usaban y qué acostumbraba escuchar de joven.
  3. Lean su libro favorito. Si a tus abuelos les agrada mucho la lectura, pero ya no pueden hacerlo, desempolva los libros de su biblioteca y por algunas tardes lee con ellos sus historias favoritas. Quizás les baste con tenerte cerca, y el aliciente de que estás haciendo algo por su bienestar les traerá mucha alegría y quién sabe, tal vez te recompensen con un gran abrazo.
  4. Miren fotografías. ¿A quién no le gusta ver fotos? A todos, pero sobre todo a los adultos mayores. Es una manera maravillosa de compartir y remontarse a otras épocas. Ellos traerán al presente sus hermosos recuerdos y, si te muestras lo suficientemente interesado, podrán sorprenderte contándote algún secreto jamás revelado de su juventud.
  5. Salgan de paseo. Si a tu abuelo ya le cuesta caminar, invítalo a un paseo en automóvil. Vayan al campo, a respirar aire puro. Seguro se sentirán renovados. Es fundamental respetar sus tiempos y sus necesidades para que no sufran incomodidad o demasiado cansancio. Por eso, tenles paciencia y recuerda que no es importante cuánto ejercicio logren hacer o si van muy lejos, sino que él renueve su aire y que reciba todo el amor de sus nietos.

Si bien el mejor obsequio es el amor y el tiempo que les dedicas, descubre en este artículo qué tipos de regalos puedes hacerles en su cumpleaños o para algún otro acontecimiento.

En lo personal no pasa un día en que no extrañe a mi abuela. A veces me lamento y pienso que, aunque compartíamos muchas cosas, podría haber pasado más tiempo con ella. Pero me queda la conciencia tranquila de haberle dado mil abrazos, de haberle agradecido su amor y de expresarle el mío. Por eso, si todavía tienes a tus abuelos, aprovecha cada instante, no esperes más para abrazarlo. Cada momento que pasamos con ellos debe ser atesorado, ya que no estarán con nosotros para siempre. Por eso, no dejes que pase un día sin decirles cuánto los amas.


El punto de vista del autor no necesariamente representa la opinión editorial.

Advertisement
Toma un momento para compartir ...

Maia Fernandez

Maia Fernández vive en Argentina.Considera fundamental la educación de los niños y al arte en sus diferentes manifestaciones como un componente irremplazable de la misma. Blog www.educacionmusicalencasa.blogspot.com.ar