¿Por qué no duran mis relaciones de pareja?

En el amor, el truco está en saber respetarse e ir ambos en la misma dirección.

Erika Patricia Otero

Hay personas que tienen una suerte increíble para mantener una relación por largo tiempo. Sí, puede ser que no lleguen a concretar un matrimonio, pero esas relaciones les dejan buenos recuerdos. También está el otro lado de la moneda, personas a las que no les duran las relaciones sentimentales.

Las primeras no temen volver a darse una oportunidad en el amor; sin embargo, para las segundas personas la situación es muy diferente porque -por su experiencia- siempre les pasa lo mismo. Llegan a tal falta de fe en el amor, que dejan de insistir porque es mucho desgaste emocional. No es que no crean en el amor, es que no saben qué pasa que no les va bien.

Amar te vuelve vulnerable

Cuando amamos a alguien nos volvemos frágiles ante ellos. Nos exponemos de manera voluntaria externa e internamente. Depositamos nuestra total confianza en otra persona y dejamos todo nuestro ser en sus manos.

Para bien o para mal, decidimos poner en las manos de otro nuestro corazón. Con esto, le otorgamos una especie de poder sobre nosotros; lo que resulte ya no depende mucho de nosotros. Si hay una entrega mutua es posible que la relación sea estable y duradera; sin embargo, si “nuestro amor” decide irse, esto generará mucho dolor.

Por qué para algunas personas sus relaciones no duran

La realidad es que puede haber varias razones.

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1 Ponerle fin a la soledad

Tener una relación sentimental con alguien para no estar solo es igual a jugar con esa persona.

Lo quieras o no, tarde o temprano va a darse cuenta de la situación; le va a doler y se va a ir de tu lado. De nuevo vas a quedarte solo. Es injusto usar a alguien para llenar vacíos emocionales. Es como tratar de tapar el sol con un dedo; algo imposible porque la verdad va a salir a la luz.

2 Curiosidad

No voy a mentir. Mi primera relación sentimental la tuve por curiosidad; yo solo deseaba saber qué se sentía tener una relación con alguien.

No puedo decir que él me gustaba, porque mentiría. Me parecía alguien agradable y fue tanta su insistencia que acepté. Obviamente las cosas no iban a durar porque ambos nos estábamos engañando. Él buscaba algo que yo no iba a darle, y él a mí no me inspiraba absolutamente nada. Creo que duró un mes y me alegro que las cosas no salieran bien, hubiera sido un error.

Dar iniciada una relación por curiosidad puede meterte en problemas porque ambos van por direcciones diferentes. Al cabo del tiempo, o los dos se harán daño o terminarán odiándose y esto no es bueno para nada.

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3 No estar en la misma “sintonía”

Gustarse y enamorarse están lejos de ser verdadero amor, aunque sí puede ser la antesala. Llegar a amar a alguien toma tiempo y entrega, pero este no es en realidad el problema.

Una pareja puede tener los mismos gustos y compenetrarse mutuamente en muchos aspectos y, sin embargo, no ir en la misma dirección.

Es claro que no todos los noviazgos llegan al matrimonio. Para que esto suceda ambos deben tener la misma meta. No todas las mujeres y hombres buscan casarse. Tal vez tengan miedo al compromiso o sus prioridades en ese momento son otras; por eso, antes de ilusionarse con alguien debemos saber si vamos en la misma dirección.

4 Ser incoherente con lo que se dice y se desea en realidad

Nada cuesta ser coherente entre lo que quieres y lo que dices. Pese a eso, hay quienes dicen no querer tener una relación y aun así sufren cuando su relación reciente termina.

La situación es que es tu deber es poner las cartas sobre la mesa y ser honesto con tus sentimientos. Ser franco atraerá a tu vida a personas que sintonicen contigo.

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5 Elegir mal

Esta es la realidad de muchas personas, no saber elegir a quién amar. Muchas veces escogemos personas que no van a darnos más que sufrimientos; es como si nos empecináramos en elegir siempre al mismo tipo de persona.

Para dejar de elegir al equivocado, debemos hacer un profundo trabajo de amor propio. Una baja autoestima nos lleva siempre a equivocarnos en nuestra elección de pareja. Es como si buscáramos en el exterior llenar nuestros vacíos afectivos.

Si no aprendes a amarte antes, no sabrás darte el lugar que mereces ante ningún ser humano. Si te respetas, aprenderás a ganarte el respeto de los demás. Es lo mismo en el amor; si aprendes a valorarte, hallarás en tu camino personas que te van a amar y valorar. Por lo tanto, te darán el lugar que mereces y buscas.

6 Mala comunicación

Muchas relaciones llegan a su fin en el primer tropiezo. La verdad es que no muchas personas están dispuestas a aceptar un mal entendido tras otro; tampoco saben comunicar lo que les molesta.

Algunas relaciones permanecen en el tiempo porque las partes saben comunicar lo que sienten y les molesta. Esto es lo que hace que una relación perdure: la honestidad y sinceridad en la pareja.

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Hacer funcionar una relación sentimental requiere de ir en la misma dirección y saber comunicarse. Aprende de tus fracasos pasados y arriésgate, la persona especial te amará incondicionalmente.

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Erika Patricia Otero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.