Por qué no estoy aburrida de mi esposo tras 20 años juntos

Fernanda Gonzalez Casafús

La monotonía puede apoderarse del matrimonio. Pero el aburrimiento sólo da lugar a más creatividad

Nos conocimos en plena adolescencia. Y sin darnos cuenta, nos fuimos enamorando. Hoy, cuando miramos hacia atrás vemos un mundo inmenso construido juntos, y aunque el aburrimiento a veces parece estancar la relación, luego surge la creatividad y volvemos a empezar.

“¿Cómo hacen para no aburrirse? “ Me preguntó una conocida el otro día. Y tengo mis indicios de que a mi marido le han preguntado lo mismo. Entiendo a la gente que le resulte difícil comprenderlo. En esta sociedad actual donde lo que no sirve o se gasta, se tira, parece raro que sigamos poniéndole fichas a una relación cuando comienza a desgastarse.

Se puede

Se puede mantener la chispa tras 20 años de amor. Justamente porque hay amor. Pero además, hay ingredientes fundamentales como la empatía, el perdón, la comprensión y sobre todo, la paciencia.

Sí. Hay días difíciles. Días de apatía total. Días en los que anhelo tremendamente esas mariposas en el estómago cuando él me pasaba a buscar. Y días en los que prefiero quedarme en casa y pedir una pizza antes de salir. Pero ello no significa que nuestra relación se haya vuelto aburrida.

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Él me hace reír

La verdad es que corro con una ventaja. Es imposible aburrirse con alguien que te hace reir. Siempre él me saca una sonrisa y cada vez estoy más convencida que el buen humor, las bromas, las sanas mofas, son ingredientes que alimentan y reavivan la pareja.

También hay días en los que su cara es una piedra. Y días en los que mi humor está bien feo. Pero lo sobrellevamos y atravesamos esas dificultades como cualquier pareja. Después de todo, nos conocemos, y sabemos que sólo será pasajero. Y si no lo es, lo conversaremos.

No todo es como al principio

No podemos esperar que la relación sea la misma tras veinte años. Él sigue siendo romántico, pero ya no es el chiquillo de 18 años enamorado esperándome con rosas para sorprenderme. Él ahora me compra medio kilo de helado de crema y ya me conquistó. Y yo le preparo una rica cena, y volvemos a enamorarnos.

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Hay días que son aburridos. Sí. Y el matrimonio no es como un cuento de hadas (aunque al principio lo parezca). Así que si mi esposo tiene días “aburridos” simplemente dejo que así suceda. Si quiere dormir, lo dejo dormir. Si está cansado o preocupado, lo escucho. Y si él o yo algún día no tenemos ganas de salir, pues nos quedamos en casa.

Acompañar sin juzgar

No se trata de juzgar a nuestra pareja porque ya no son como solían ser. Las cosas van cambiando, y debemos saber ver lo positivo de cada situación. Se trata de acompañarnos en el crecimiento, sin juzgar o acusar, con la convicción de volver a enamorarse cada día descubriendo nuevas cosas, nuevas actitudes, y nuevos proyectos.

Con el tiempo comprendí que no dependía de él que yo me divirtiera, sino de ambos, pues la construcción de la pareja se da de a dos. Y si en algún momento nos sentimos aburridos, simplemente trabajamos en consecuencia. De ambos depende mantener la chispa.

Las causas pueden revertirse

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Si te sientes cansada, aburrida, o frustrada porque sientes que tu pareja está estancada y la relación se tornó aburrida, primero debes buscar las causas, para poder revertir la situación y transformar tu relación en un torbellino de emociones positivas.

Algunos motivos por los que tu relación se haya tornado aburrida pueden ser:

  • Falta de motivación
  • Intereses individuales contrapuestos
  • Falta de comunicación
  • No prestar atención a los detalles

Evita el aburrimiento

Como decía al principio, no se trata de vivir en un jolgorio permanente, pues en la pareja habrá momentos en los que te sientan aburrida y frustrada. Pero puedes evitar el aburrimiento y el estancamiento de la relación con simples acciones. Sólo hay que poner voluntad y animarse.

No inventes “recetas” para no aburrirse. Simplemente crea cada una por cada situación. Todo va cambiando de acuerdo al momento

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Mantén un espacio para tí. Los momentos de soledad y encuentro con uno mismo pueden hacer que volvamos a la relación renovados y con más alegría

Planeen una cita: Después de algunos años, muchas parejas simplemente dejan de salir a solas. Sin embargo, salir en una cita “de novios” encenderá la chispa

Aprendan algo juntos: Un deporte, o una carrera o algo que les guste. ésto puede ser un aliciente a descubrir nuevas facetas (y pueden divertirse mucho).

Tu relación puede tornarse aburrida, pero a veces el aburrimiento enciende la creatividad, y nos invita a reconstruir y apostar a más. (Tras veinte años en pareja, te aseguro que ambas cosas, suceden).

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Fernanda Gonzalez Casafús

Fernanda es Licenciada en Periodismo, especialista en Redacción Digital y Community Managment. Editora de contenidos y redactora en Familias.com. Nacida en Argentina y mamá de dos, ama los animales, la danza, la lectura y la vida en familia. Escribir sobre la familia y la maternidad se ha convertido en su pasión.