Vídeo: Niños desaparecidos. Cuida que tu hijo no sea una estadística

A diario leemos y escuchamos sobre “niños desaparecidos”, sin siquiera imaginar que eso nos podría pasar a nosotros. ¿Están seguros nuestros hijos en la calle?

Diana Brante Morales

Alicia era madre de tres pequeños niños. Todos los días los llevaba un rato al parque para que jugaran y descargaran su energía. Acudían siempre al mismo sitio y en el mismo horario, ya que nunca imaginó que mantener una rutina podría volverse en su contra. Un día que decidió ir al parque en compañía de dos amigas y sus respectivos hijos, sucedió que mientras ellas conversaban un hombre se acercó a los niños y se llevó a uno de ellos. Asustados, los otros niños corrieron para dar aviso a sus madres, quienes de inmediato lograron dar con aquel desconocido. Por suerte, ellas les habían explicado a sus hijos cómo reaccionar frente a ese tipo de situaciones.

La historia que te cuento no sucedió a kilómetros de distancia ni en lugares remotos, Alicia, no era una mujer de clase baja o falta de educación y sus hijos no eran malcriados. Esto le sucedió a una familia que podría haber sido la tuya o la de cualquiera, por lo que es importante que enseñes a tus hijos cómo protegerse en la calle ante situaciones como ésta. A continuación, comparto contigo aspectos que considero fundamentales y algunas sugerencias de cómo tratarlos con tus hijos.

1. Nunca hables con un desconocido

Muchos de los que somos padres decimos a diario a nuestros hijos que no deben hablar con desconocidos, pero ¿qué pasa cuando esa persona tiene algo que pueda provocar el interés del niño o niña, ya sea una mascota, un juguete o caramelos? ¿Cómo reaccionarían nuestros hijos ante tal situación?

Probablemente, la mayoría de ellos olvidaría nuestro consejo y seguiría su curiosidad infantil, por eso es muy importante que le des ejemplos de situaciones que podrían suceder y cómo deben reaccionar ante ellas. Tal vez puedas pedirle a algún conocido, a quien tú hijo o hija no conozca, que se acerque y le ofrezca jugar o alejarse del lugar en que tú te encuentras. Quizá se asuste un poco, pero te aseguro que luego lo recordará y tendrá mayor cuidado. Te invito a mirar nuevamente con cuidado el vídeo de arriba.

2. Siempre camina acompañado

A medida que los niños van creciendo buscan asumir nuevas responsabilidades, como ir a la tienda solos, caminar al colegio con los amigos o salir a la plaza a jugar. Por más miedo que nos dé, no podemos negarles la posibilidad de sentirse más grandes, por lo que debemos enseñarles a hacer todas estas acciones con el cuidado necesario.

Por ejemplo, si autorizarás a que vaya a la tienda solo, avísale al dueño del negocio para que esté al pendiente de tu hijo. Si acaso tiene hermanos mayores, haz que lo acompañen al menos hasta que conozca mejor el camino y tú sepas cuánto tiempo le toma ir y volver a casa. Si va a caminar al colegio sin tu compañía, que lo haga en grupo y que se acostumbre a no andar solo en calles con poco tránsito, adviértele de los peligros a los que se puede ver enfrentado y procura mantener contacto con los padres de sus amigos. De esta forma, si llegara a suceder algo extraño como un retraso en su hora de llegada, sabrás con quién y dónde está.

3. No es natural que tengan amigos muy grandes

Recuerdo que cuando vivía en la casa de mi abuela había dos grupos: el de los grandes y el de los chicos. A los pequeños no nos invitaban a fiestas ni nos dejaban estar cerca cuando conversaban de asuntos “de grandes”, sin embargo, había un chico que hacía la excepción. Él era bastante mayor que el resto, ya que mientras nosotros bordeábamos los 12 o 13 años, él estaba cerca de los 20. Al principio, no vimos nada malo en ello, hasta que una de las niñas dijo que la había besado. Lo mejor y lo más sano es que los niños convivan con sus pares, por lo que sí existe en su grupo de amistades alguien mayor, mantente alerta.

Muy probablemente los niños no verán el peligro en las personas o en las situaciones a las que se exponen, por lo que es muy importante controlar su grupo de amistades, sus salidas e incluso estar al tanto de sus temas de conversación. No busques asustarlos, pero tampoco tapes el sol con un dedo. Habla con la verdad, endulza lo que sea necesario y verás que tus hijos son capaces de entender las cosas muy bien.

Un consejo final: fortalece la confianza entre ustedes. La única forma en la que puedes estar segura de que sabrás cualquier cosa que pase con tu hijo, es fortaleciendo su relación a través de la confianza.

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Diana Brante Morales

Me gusta comenzar cada día como un nuevo día, darme la oportunidad de ser feliz y sonreír por las cosas básicas. Dar sin esperar nada a cambio. Siempre sorprenderme.