¿Eres malagradecido? si tienes estas 5 costumbres, tendrás la respuesta
"Al mal agradecido, la miseria le refresca la memoria". Anónimo.
Erika Patricia Otero
No sé cómo funcione en otros países, pero de donde yo soy, desde niños nos enseñan a tener buenos modales.
Es común que veas a los padres enseñar a sus hijos a ser corteses, amables y educados. Constantemente se inculca urbanidad básica. Es así como saludar al llegar a un lugar o encontrarse a alguien en la calle; ceder la silla a los mayores; decir “por favor” y “gracias”; “sí, señor” o “no, señora”, se vuelven acciones que indican respeto hacía los demás.
A pesar de esto, muchas personas omiten este tipo de educación, criando así a niños tiranos. Criaturas que creen que el mundo les pertenece y tienen derecho a hacer lo que quieran; incluso, pasar por encima de los demás.
Tal vez sea debido a esto que muchas personas adultas hoy día suelen ser muy poco agradecidas. Es como si creyeran que los demás tienen obligaciones intrínsecas con ellos.
No hay nada peor que una persona malagradecida. Relacionarse con ese tipo de personas desanima mucho a quien de buena voluntad ofrece su ayuda.
¿Qué es ser agradecido?
Ser una persona agradecida es tener una buena actitud ante la vida. ¿Por qué digo que es una actitud ante la vida? Porque a diario recibimos obsequios y favores tanto de quienes nos rodean, así como de la vida misma. Y muchas veces no somos conscientes de lo que estamos recibiendo.
Agradecer es muestra de que eres humilde; además, demuestra que eres conciencie de tu naturaleza humana. Vivimos en una sociedad que se interrelaciona. Muchas veces, las personas hacen cosas que sin querer nos benefician de mil formas; solo por eso deberíamos estar agradecidos.
Cuando eres agradecido atraes más “beneficios” y bendiciones a tu vida. Las personas van a querer seguirte dando y ayudando; es simple, te ganas la gracia y los favores de los demás. Además, te vas a rodear de muchas personas con buenas intenciones.
¿Qué pasa cuando no eres agradecido?
Una persona que no es agradecida poco a poco se queda sola. La razón es que su actitud es negativa. ¿Quién querría tener cerca a una persona que considera que todo favor que recibe no se debe a la bondad, sino que es merecedor de ellas? Nadie.
Otro aspecto interesante es que por lo regular una persona desagradecida jamás está satisfecha con lo que recibe. Es como que nunca encontrara un punto de satisfacción entre lo que recibe y lo que considera que merece.
5 Costumbres de las personas desagradecidas
Una persona desagradecida es fácilmente identificable porque suele tener estas 5 costumbres muy desagradables. Estas son:
1 Siempre necesita algo
Las personas desagradecidas siempre van a pretender que necesitan que hagas algo por ellas. Lo que sea que quiera, va a querer que lo hagas por ellas. Lo peor de todo es que da por hecho que es tu obligación ayudarles.
Si una persona ayuda con algo es porque así desea hacerlo, no porque sea su deber.
Las personas malagradecidas deben aprender a vérselas por sí mismas. Además, también deben dejar de ser tan demandantes. Nadie le debe nada a nadie, y si se recibe una colaboración, lo justo es que estés dispuesto a retribuir.
2 Solo muestra interés en ti cuando necesita algo
Creo que todos tenemos ese “amigo” que solo te busca cuando necesita algo de ti. Lo que sea, ya se trate de un favor en físico o solo hablar porque no tiene a nadie, va en tu búsqueda.
Horrible, en lo personal, yo prefiero no hablar con nadie a que me usen de esa manera.
Lo peor es que son tan egoístas que jamás tendrán en cuenta tus necesidades. Si eres tú quien necesita ayuda, simplemente se olvidan de ti y te ignoran. Jamás esperes ayuda de alguien así; no vas a recibirla.
Una persona malagradecida se queda sola porque no eres la única persona que trata así.
3 Siempre van a estar a la espera de tu ayuda
Ya se trate de familiares, amigos o simples conocidos, van a esperar que les ayudes porque creen tener derecho a eso.
Además, es usual que te recuerden algún momento en el que hicieron algo por ti. Te la van a reprochar cada que te niegues a prestarles tu ayuda. Es como si tuvieras una deuda eterna con ellas.
Nadie nos debe nada. Repito, si alguien hace algo es porque desea hacerlo, no porque sea obligatorio. Si tu retribuyes un favor, es porque eres agradecido, no porque tengas deudas morales de por vida.
4 Todo gira en torno a él o ella
Ya lo señalé un poco más arriba: las personas malagradecidas son egoístas. El asunto es que creen que tú les debes servir porque son ellas.
Razón por la cual, sea lo que sea que estés haciendo, “debe” quedar en segundo lugar para ir a “servirle”. Y cuidado con negarte, tendrás su malestar y rabia por un buen tiempo recargándose en tu espalda.
5 Se vuelven en tu contra
Es muy posible que esto ocurra cuando se den cuenta que ya tienes suficiente de su actitud.
El resultado es que como te negaste, lo más probable es que te “culpe de sus desgracias”. Además, que no te extrañe que hable mal de ti y ponga a otros en tu contra.
Las bendiciones que llegan cuando eres agradecido
De esto doy fiel testimonio. Ser una persona agradecida cambia la vida y siempre para bien.
Ser agradecido abre los ojos. Comienzas a ver la gran cantidad de cosas que tienes y de las que apenas eras consciente. Quizás lo mejor de esta actitud positiva es que muchas más cosas hermosas llegan a tu vida.
Es por esto que te invito a cambiar de actitud si tienes alguna de las costumbres antes citadas. Te garantizo que la vida te cambiará para bien.
Erika Patricia Otero
Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.
