Cuando supe que te perdí: el aborto involuntario

El aborto involuntario causa un dolor intenso y profundo; sin embargo, existen cosas que se pueden hacer para empezar a sanar y recordarte que tú sigues siendo madre y tu bebé sigue siendo tuyo.

Denhi Chaney

Nada te puede preparar para enfrentar las siguientes palabras: “Lo sentimos, pero no encontramos el latido del corazón: has perdido al bebé”. En tan solo unos segundos sientes que has caído en tu peor pesadilla, entras en negación y al mismo tiempo depresión mientras tus lágrimas caen libremente sobre tus mejillas. El dolor de un aborto involuntario es difícil de describir, y tal vez tal tarea no se debe de intentar, pues todas las palabras del mundo resultan inadecuadas, pese a lo que podamos aprender de esta pérdida silenciosa. Sin embargo, lo que sí se debe intentar es describir lo que podemos hacer para sanar de tal pérdida, no con el fin de olvidar —pues uno jamás olvida al bebé que perdimos— sino seguir adelante y honrar su memoria.

Se denomina aborto involuntario, al fallecimiento de un bebé antes de las veinte semanas de embarazo, lo cual hace difícil el saber el porque se pierde a un bebé, y hace todo el proceso complicado para los padres, pues no existe mucha evidencia de su vida, ni una tumba en donde pueden ir; sin embargo, esto no indica que tu bebé no fue real ni tuvo vida, FUE REAL PARA TI y eso es todo lo que necesitas saber. A continuación te presento algunos consejos que te pueden ayudar para sanar de esa herida tan profunda; es importante mencionar que no tienes que hacer todo lo que aconsejo, solo haz lo que TÚ sientes que será de beneficio para ti y tu familia.

1

No pretendas que no existió

Tal vez puedas pensar que si dejas de hablar del suceso, ya no sentirás más dolor; mas no es así, el dolor crece y se vuelve casi insoportable cuando mantienes silencio. No intentes convencerte que tu bebé nunca existió: habla de tu experiencia con aquellos con quien confías. Deja que tus conocidos te brinden su amor y apoyo —incluso si por alguna razón ellos no te pueden entender— y sobre todo no busques olvidar, pues tu corazón siempre te hará saber que el amor de una madre nunca se olvida.

2

Ponle un nombre

Este paso es difícil para algunas parejas, puesto que nunca supieron si era niño o niña; sin embargo, sigue tu instinto maternal y ponle un nombre, o incluso un sobrenombre amoroso. El punto es que este bebé tenga algo personal, y tú tengas una forma de llamarlo.

3

Crea algo físico

Como mencioné antes en estos casos no existe un lugar físico en donde podemos ir a dejar flores, pero eso no significa que no puedas tú crear tal lugar. Puedes comprar una caja y poner todo lo que tengas que se relacione con este bebé, tales como fotos de ultrasonido, alguna ropa que le hayas comprado, fotos etc. El punto es tener algo físico que solidifique tu experiencia, pues el perder a alguien a quien no conociste crea un dolor ambiguo, pero el crear cosas tangibles ayuda con el dolor y la pena.

Advertisement

4. Fluye con tus emociones

Acepta TODAS tus emociones, tanto las de tristeza como las de felicidad. Todas estas emociones van a ir y venir como una montaña rusa, así que acéptalas: si quieres llorar, llora. Si quieres reír, ríe; no te detengas. 

__5. Apóyate en tu pareja

El dolor puede separar, pero en medio de esta adversidad, también te puede unir a tu esposo, y a encontrar consuelo y apoyo en sus brazos.

Un aborto involuntario rompe tu corazón, y no se puede esperar que al hacer estas cosas que te he sugerido, el dolor va a desaparecer de inmediato. Lo que sí puedo decirte es que lo mucho o poco que te ayude, te será de beneficio. Una madre no deja de serlo porque no tuvo la oportunidad de tener su hijo en brazos. Una madre lo es, por el amor que desarrollamos por nuestros hijos, mucho antes de verles los ojos; por la devoción y los sacrificios que hacemos por voluntad propia, antes de que puedan decir te quiero; eres una madre porque así lo decidiste y nada en el mundo puede cambiarlo.

Toma un momento para compartir ...

Denhi Chaney

Denhi Chaney es egresada de la Universidad de Brigham Young con maestría en Terapia de Matrimonio y Familiar. Denhi también es esposa y madre de un niño. Puedes contactarla en .