La crisis de los 50 en los hombres
La crisis de los 50 años es algo que afecta a muchos hombres. Lee este artículo para conocer qué hacer al respecto.
Adriana Acosta Bujan
En distintos medios de comunicación nos siguen vendiendo la idea de que la juventud es un divino tesoro, si bien lo es, es imposible retroceder el tiempo y dejarlo estático para permanecer jóvenes toda la vida, pues cumplir años es algo normal que no podemos ocultar.
Sin embargo, hay personas que esa idea no les cae muy bien, pues comienzan a sentirse degradados, inútiles, insatisfechos y posiblemente pueden entrar en una depresión al cumplir los 50 años; pues bien saben que tanto física como emocionalmente ya no pueden hacer ciertas cosas como antes.
No esta demás mencionar que la crisis de los 50 puede pasarnos a todos, sin embargo, en este artículo nos enfocaremos en los hombres, pues es más frecuente de observarlo. Ahora bien, ¿Qué es la crisis de los 50 años? La respuesta es sencilla, se trata de un problema relacionado con la autoestima en la cual la percepción de edad tiene un papel importante.
Aceptando la edad
Como bien decíamos, la crisis está relacionada con la percepción e ideas erróneas sobre la edad. Para algunos hombres cumplir los 50 años significa la pérdida de su masculinidad, el deterioro de su aspecto físico y fuerza, lo que los motiva a realizar cosas que ya no pueden o se ven ridículas solo por aparentar ser más jóvenes.
¿Cómo identificar a la crisis de los 50?
Los síntomas pueden variar, pues cada persona es distinta; sin embargo, los más comunes son: irritabilidad, nerviosismo, intranquilidad, cambios de humor radicales, pérdida de la autoestima y confianza, depresión y desinterés en cumplir algunas metas.
¿Qué hacen algunos hombres durante la crisis?
1. Cambiar su forma de vestir
Algunos hombres cambian todo su guardarropa y estilo de vestir para usar ropa más juvenil. Por lo general son los típicos que al ir de compras se van directo a los pasillos juveniles para comprarse un pantalón, una camisa o una chaqueta de moda.
Si bien a algunos les puede quedar el cambio de look, a otros la verdad no tanto, pues con el afán de aparentar menor edad suelen elegir ropa que nos les va bien, ni con su físico ni personalidad.
2. Hacen ejercicio
Sí, el físico cambia sin dudarlo y el cuerpo ya no es el mismo, por ello es que muchos hombres suelen apuntarse en el gimnasio para recuperar la fuerza de sus músculos y su atractivo. Pues temen ya no ser varoniles.
Ahora bien, no está mal hacer ejercicio, al contrario, es recomendable, sin embargo, el problema es que algunos hombres se obsesionan tanto por lucir jóvenes que no logran percibir los riesgos de las lesiones que pueden causarse sin la guía de un experto; incluso deciden ingerir formulas vitamínicas para endurecer sus músculos, las cuales en exceso terminan perjudicando su salud.
3. Modifican su forma de hablar
Todos los jóvenes tienen sus modismos y palabras que los identifican, simplemente es moda. Los hombres, con la crisis de los 50 años tratan de cambiar su bagaje cultural incorporando palabras juveniles en su lenguaje para sentirse jóvenes y actualizados. Algunas veces escucharlos hablar suena raro cuando lo hacen en contextos que no son adecuados, por ejemplo, en su trabajo.
4. Infidelidad
Algunos hombres por probar su masculinidad y querer volverse a sentir jóvenes experimentan relaciones fuera del matrimonio, por supuesto con mujeres con menor edad. Esto los hace sentirse atractivos, recuperando su autoestima.
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5. Frustración por las metas no cumplidas
La edad pasa factura y si no te enfocaste en realizar esas metas que tuviste hace años, tal vez sea más complicado realizarlas a los 50 porque ya no se tiene la misma vitalidad que antes y las oportunidades suelen reducirse.
Sin embargo, eso no significa que los hombres a los 50 años dejen de plantearse metas y de tener sueños, al contrario, se enfocan en metas más realistas que van relacionadas a su vejez y bienestar.
6. Nuevas maneras de pensar
Los hombres en esta crisis de los 50 años muchas veces van desarrollando complejos sobre su apariencia, sus habilidades porque desean ser mucho más jóvenes. Sin embargo, hay cosas que relativamente ya no les interesa hacer o que ya no lo ven tan divertido, pues se enfocan más a encontrar momentos de paz y tranquilidad para disfrutar con su familia y tal vez nietos.
Salir a una discoteca a bailar por la noche, comer sin medida, hacer deporte sin límite, ya no son cosas que les llame la atención. Ahora ven las cosas diferentes y han encontrado otras maneras de divertirse.
Los hombres que experimentan esta crisis pueden pedir ayuda a un especialista en la materia, pues lo más importante es recuperar su autoestima, seguridad y confianza en ellos mismos. Sin importar la edad que tengan ellos siguen siendo personas capaces, atractivas, maduras e inteligentes con todo un mundo de oportunidades y metas nuevas por cumplir.
Adriana Acosta Bujan
Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.
