Para las madres que se han convertido en “maestras” de sus hijos

¿La pandemia te ha orillado a tomar más responsabilidades de las que tenías? Ser mamá y maestra al mismo tiempo, puede resultar agotador. Aquí te comparto algunas ideas para relajarte en esta nueva misión.

Adriana Acosta Bujan

Muchos países aún están viviendo la emergencia sanitaria por causa del coronavirus; aunque la economía se reactivó y las personas empezaron a salir a las calles con la “nueva normalidad”, las Instituciones educativas se encuentran cerradas, tal vez por un largo tiempo hasta que las autoridades lo autoricen, esto será cuando la pandemia se logre controlar.

Por esta razón, todos los estudiantes del mundo han tenido que aprender a través de la tecnología con las clases a distancia, ya que es preciso que “se queden en casa” para evitar ser contagiados. En algunos países ha funcionado la nueva manera educativa, pero en otros no; ya que existen muchas poblaciones aledañas que no cuentan con el servicio de internet y eso ha complicado la transmisión del aprendizaje.

Tal vez, para los pequeños estudiantes tomar las lecciones desde casa sea algo divertido e incluso menos estresante, ya que no tienen que levantarse temprano para ir corriendo al colegio por las mañanas; además que aparentemente tienen más tiempo libre para jugar. Sin embargo, para los padres esta nueva modalidad de estudio puede resultar un método inadecuado, debido a que ahora las madres han tenido que tomar el rol de maestras de sus hijos, lo cual no es nada sencillo.

Cabe mencionar que algunas madres no solo se dedican al cuidado de su hogar, también algunas mujeres salen a trabajar para contribuir con la economía familiar, y eso por obvias razones ha complicado su estilo de vida al grado de afectar su salud física y emocional.

Mujeres y madres en tiempos del coronavirus

Ser mujeres, madres, esposas, trabajadoras y además maestras, no es un rol fácil de ejercer; no es lo mismo llevar al colegio a los hijos y apoyarlos con algunas tareas en casa que enseñarles las lecciones completas diariamente ¡eso estresa a cualquiera!, puesto que se aumentan las responsabilidades.

A pesar del cruel escenario, todas las madres se han esforzado para que sus hijos logren cumplir con sus deberes escolares y estudiar. Ellas se han convertido en luchadoras invencibles, capaces de volver a retomar aprendizajes que tal vez ya no se acordaban o que habían dejado de practicar; todo por el bienestar de sus pequeños.

El problema es que la pandemia ha dejado muchos cabos sueltos; podríamos decir que el verdadero objetivo de que los hijos aprendan ha menguado.“Estudiar en casa” da la oportunidad a los estudiantes a bajar su nivel de rendimiento escolar, tal vez porque no hay un itinerario que cumplir.

¡Mamita, toma un respiro!

Para poder sobrellevar la carga de responsabilidades y así evitar afectar tu salud gravemente, te dejo algunas recomendaciones:

1 No romper con la rutina

Acostumbra a tus hijos a llevar una rutina similar a la que estaban acostumbrados cuando iban al colegio. Es decir, levantarse temprano, desayunar, asearse y prender su dispositivo móvil para estar presentes en sus clases a distancia. Cuando se acerque la hora que supuestamente es la salida de la escuela, ellos habrán terminado con sus lecciones del día.

Después, será momento de alimentarse y disfrutar de una comida familiar, así como también para distraerse y relajarse. Por las tardes, a la hora que estaban acostumbrados a sentarse para realizar sus tareas, es la misma que deberán respetar. La idea es que ellos sigan con una rutina y que no, por el pretexto de estar en casa, dejen sus pendientes sin concluir.

2 Material de apoyo

Una de las ventajas es que con el internet se puede aprender de manera más sencilla; por ello es conveniente que puedas apoyarte buscando herramientas visuales que te ayudarán para que tus hijos comprendan las lecciones; me refiero a tutoriales, películas o videos en Youtube.

Ese material de apoyo será útil para tus hijos y para ti, ya que te ayudarán a recordar esos aprendizajes que tal vez ya no tienes muy presente. Incluso, puedes preguntarle al docente qué material te recomienda.

3 ¡No hagas sus tareas!

Como madre que soy y docente, sé que es mucho más fácil hacer las tareas de los hijos, con tal de tener tiempo para realizar otros pendientes. Pero al hacerlo estarás cometiendo un grave error. En lugar de beneficiarlos los estarás perjudicando, puesto que no tendrán ese conocimiento esencial para desarrollarse en la vida.

Es importante el apoyo y la guía constante para que los hijos realicen sus tareas (sobre todo cuando son pequeños), al final tendrás que aprender a soltarlos y dejar que ellos realicen su esfuerzo por cumplir. Recuerda que es parte de la crianza para lograr que ellos sean independientes y responsables.

4 Mantén la calma

Es común explotar y dejar fluir las emociones negativas en un segundo, ya que el estrés puede orillarte a perder el control fácilmente. Sin embargo, es preciso aprender a controlar esos arranques de desesperación, histeria y descontrol al enseñarles a los hijos las lecciones del colegio. Tómate unos minutos para tranquilizarte, respira hondo y exhala las veces que sean necesarias; muchas veces las madres no estamos acostumbradas a mantener la paciencia con los hijos cuando se trata de explicarles los temas escolares.

5 Transforma el ambiente

Una de las ventajas de aprender en casa es que puedes tener facilidades para motivar a tus hijos a tomar sus clases a distancia de manera divertida; cosa que muchas veces es imposible que suceda en los colegios.

Tal vez, el aislamiento social puede provocar que tus hijos se sientan tristes y desmotivados al no ver a sus amigos de la escuela; sin embargo, puedes ayudarlos a sentirse mejor aplicando otras técnicas de estudio.

Por ejemplo: poner música relajante cuando están realizando sus actividades o utilizar cosas que tengas en casa para reforzar los conocimientos. Una idea es utilizar los juguetes para enseñarles la creación del universo o jugar con una pelota para explicarles el tema de la gravedad, entre otras cosas.

Ser madres y maestras de los hijos puede ser algo positivo. Reflexiona en ello, ahora tienes más tiempo para convivir en familia, estarás más al pendiente de los aprendizajes que reciben y podrás contribuir a la formación de sus conocimientos. ¡Ánimo, pronto los hijos regresarán al colegio!

Adriana Acosta Bujan

Adriana Acosta estudió comunicación, es madre y abuela, y actualmente se dedica a la enseñanza e investigación a nivel universitario en Puerto Vallarta. Publica sus escritos esperando que ayuden a las personas que leen sus útiles vivencias.