Ventajas de tomarte un año sabático y por qué deberías planteártelo

Sea lo que sea que elijas hacer con tu vida será tu responsabilidad; así que vívelas al máximo, pero a conciencia.

Erika Patricia Otero

Se nos ha dicho de manera reiterada que lo único que no podemos recuperar el es el tiempo perdido. Crecimos con frases como: “El tiempo perdido, los santos lo lloran” o “el tiempo es oro”. Indudablemente, estas palabras ya interiorizadas nos obligan a pensar que cualquier momento de reposo es negativo para nuestra vida.

La situación es que todos hemos deseado darnos el lujo de tener un tiempo de “no hacer nada”. Aunque el impulso por hacerlo esté ahí latentemente, la verdad es que nos detenemos por temor a “perder tiempo valioso”.

Si decides hacer a un lado esos pensamientos intrusivos y te tomas un descanso, las críticas no se hacen esperar. Y vienen de nuevo esas frases repetitivas como mantras que calan en tu cabeza aun punto de hacerte sentir culpable.

Pese a eso, tomarse un año sabático es una cuestión tan personal como decidir no tener hijos o permanecer soltero. Solo por ser una elección personal asumida bajo nuestro propio riesgo, debería caber dentro de lo que todos debemos respetar.

¿Qué es un año sabático?

El año sabático es un tiempo que decides tomarte para ti mismo. En este tiempo tú eliges cómo vivir tu vida sin presiones externas como el trabajo o las rutinas cotidianas.

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Tú puedes aprovechar este tiempo en lo que desees: viajar, auto-descubrirte, prestar servicio comunitario y lo que tú quieras; la elección es solo tuya.

Lógicamente, una persona que elige tomarse un tiempo para ella y sus propósitos debe contar con un buen colchón económico; esto para que pueda vivir decentemente y sin preocupaciones financieras. Es justo por eso que la meta de muchos es ahorrar dinero y descansar. Otras personas más desean explorar otras áreas profesionales más liberales y descomplicadas. También hay quienes solo desean viajar y conocer los lugares que siempre desearon.

Como decíamos, los propósitos y metas son particulares de cada persona que elige tomarse un tiempo para ella misma.

Ventajas

Partamos del hecho que si alguien decide tomarse un descanso de la vida cotidiana es porque se siente saturado. De otra manera, ¿Qué sentido tendría querer descansar por un año?

Aclarar tu mente respeto a tu futuro profesional

Algunos jóvenes que salen de su bachillerato y aún no saben qué quieren estudiar se toman este tiempo.

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Por lo regular, muchos chicos terminan el bachiller a los 17 años, por lo menos en algunos países de Latinoamérica. A esa edad aún se es muy joven para poder tomar una decisión que podría marcar para siempre la vida de un adolescente.

Elegir una profesión o una ocupación requiere de análisis y calma. Un año sabático es ideal para lograr esa meta pues hay menos posibilidades de equivocarse al haber contemplado con calma sus opciones profesionales.

Explorar un nuevo campo de trabajo y ampliar el currículo

Hay personas que aburridas con sus empleos o profesiones deciden que ya no soportan el ritmo que llevan en ese trabajo. Es entonces cuando deciden renunciar y buscar otros lugares para ampliar sus conocimientos. Pueden ser empleos completamente opuestos a lo que ellos solian hacer; por ejemplo, pasar de ser administrador de una compañía a maestro en una universidad.

Otras personas optan por hacer servicio social en alguna institución a la que siempre quisieron apoyar. Lo creas o no, la labor social suma mucho conocimiento y brinda un bonus interesante al curriculum vitae.

Otorga tiempo para pensar

En este caso, las personas que quieren tomarse descanso de una situación que realmente puso un punto y aparte en sus vidas. Un buen ejemplo de esto son los divorcios o la pérdida de un ser amado. Esos son eventos de la vida que te llevan paulatinamente a tomarte un descanso forzado para recuperar el ánimo y las fuerzas para seguir adelante.

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Disfrutas de libertad

Si un año sabático no sirve para disfrutar de la libertad en su máxima expresión, no sé que puede hacerlo.

Poder decidir lo que deseas hacer con tu tiempo libre sin sentirte presionado por horarios y compromisos es simplemente un placer. Al principio puede ser abrumante, pero en la medida que pasa el tiempo te sientes más capaz de hacer lo que quieras sin miedos a la crítica.

Ayuda a fortalecer la madurez

No solo las experiencias duras de la vida ayudan a alcanzar la madurez; también los profundos momentos de paz y soledad.

Nada como pasar un tiempo contigo mismo para conocerte mejor y poder aprender a vivir contigo para desarrollar una buena conexión con tus emociones.

Tiempo para conocer nuevos lugares

Supón que cuentas con el dinero suficiente para ir a conocer el Machu Pichu o la Muralla China; eso seria genial. Pongamoslo un poco más aterrizado, que puedes conocer lugares de tu país que jamás has visitado, igual de genial.

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Cualquiera que sea el destino que quieras ir a visitar, un año sabático te puede permitir darte ese tiempo para explorar nuevos lugares del planeta.

Como puedes ver, tener un tiempo para relajarte, dimensionar otros aspectos de la vida alejados de la rutina y problemas cotidianos, pueden ayudarte a tener una nueva y mejor perspectiva de la vida.

Solo debes cuidar de ser consciente de que en algún momento ese año sabático llegará a su fin y tendrás que “aterrizar” de nuevo a la realidad. Disfruta mientras puedas.

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Erika Patricia Otero

Psicóloga con experiencia en trabajo con comunidades, niños y adolescentes en riesgo.