El poder de la mente para cambiar nuestra realidad

El poder de tus pensamientos es tan maravilloso, que puedes ser co-creador de la realidad. Descubre cómo se explica esta teoría, y cómo puedes hacerlo.

Danitza Covarrubias

Lo que crees, lo creas. Lo que se nombra, construye realidad. Estas son algunas de las frases que actualmente circulan. Parte de lo que crees, y de lo que hablas tiene que ver en cómo vives tu vida. Poder hacerte consciente de esto puede animarte a hacer algo para tener más poder sobre lo que acontece a tu alrededor.

Pero,  ¿es esto verdad? ¿cómo se explica? Algunos creen que es un pensamiento mágico, y que no tiene sustento científico. Otros que es charlatanería. Finalmente, si crees o no que es verdad tendrá repercusión en las decisiones que tomes, y si haces algunos cambios en este tema.

Te invito a leer  algunos conceptos que pudieran aportar a la posibilidad de la viabilidad de esta idea.

1 El poder del lenguaje

Según el autor Rafael Echeverría, generalmente concebimos el lenguaje como algo que acontece después de la realidad cuando la describimos. Sin embargo, el poder del lenguaje está mucho más allá. El lenguaje crea realidad. No porque existe cuando la nombramos. La realidad es independientemente de ser nombrada. Sin embargo, cuando se nombra, se puede reconocer su existencia, y se genera una relación con ella.

Por ejemplo, ante el descubrimiento del ADN . No significa que antes de que lo descubrieran no existiera, estaba ahí, en cada una de las células. Pero fue hasta que fue reconocida, nombrada y científicamente aceptada que iniciaron los trabajos con ella. Las posibilidades entonces se abrieron a lo que 200 años después se está realizando, como búsqueda de curaciones de enfermedades, clonación, etc.

Advertisement

De igual manera es la relación con la realidad. Es hasta que podemos reconocerla, ponerle nombre, que podemos abrir un infinito de posibilidades antes no concebidas. Es ahí donde radica el poder del lenguaje, y la importancia de nuestras palabras.

2 El ciclo de la experiencia

Cuando vivimos una experiencia, se dan sensaciones, y a través de nuestros pensamientos  (manera de nombrarlas a través del lenguaje) se pueden convertir en sentimientos. Es entonces como después narramos nuestra historia, las diferentes historias que narran nuestra vida.

Es ahí, en esa narración, donde el lenguaje cobra vida. Es también en el pasado donde creamos nuestra realidad, los significados de los sucesos, la manera en la que nos relacionamos con las personas. En primer lugar, de las personas primarias que han estado en nuestra vida, y a partir de ahí, después, con el resto del mundo.

Es, en re-crear nuestro pasado, al hablar diferente de él, que podemos también modificar nuestra manera de relacionarnos con el mundo. Es a través de ello que también podemos re-crearnos a nosotros mismos. Mirarnos de una nueva manera también es una manera de tomar acciones distintas. Es una manera de tener nuevas experiencias que nos enriquecerán y harán crecer.

3 La física cuántica

A partir de los avances científicos de la física y la biología, es que también podemos evolucionar en otras áreas. La física cuántica trajo nuevas ideas, y nuevas implicaciones. Por ejemplo, el efecto del observador. Este efecto consiste en que en un experimento, los observadores de un átomo afectaban la conducta de este. De igual manera, como seres humanos, no escapamos a estas leyes. La presencia de ciertas personas afecta nuestra conducta, y por lo tanto, nuestra vida.

Advertisement

El qué y cómo observamos, qué y cómo lo nombramos, tiene que ver con cómo construimos la realidad y nuestra relación con esta. No sólo metafóricamente, si no que a partir de estos hallazgos científicos podemos afirmar que hay elementos para creerlo.

4 Cuidar tus pensamientos

Pensamos que no tenemos control de lo que vivimos, sentimos, pensamos. No podríamos estar más equivocados. Las sensaciones que surgen a partir de los estímulos externos no podemos controlarlo. Sin embargo, podemos decidir lo que pensamos de ello. Podemos decidir la actitud ante la vida. Podemos decidir las acciones y decisiones que tomamos.

Cada día decidimos qué ropa vestir, qué comer, qué zapatos ponernos. No debería haber diferencia en elegir qué pensamientos tener. Qué actitud ante la vida tomar.

Podemos, por ejemplo, poner ideas fundamentales como recordatorios en diferentes espacios. Por ejemplo, papeles pegados en nuestro espacio de trabajo, o en la cocina, o ahí, donde pasamos mucho tiempo. Actitudes que aunque parezcan fingidas, nos sirvan. Por ejemplo, sonreír. Se ha comprobado científicamente que sonreír, e incluso reír, aunque sea de manera fingida, provoca que nuestro organismo segregue sustancias como si estuviera sucediendo de manera sentida. Esto da por consecuencia, que aunque no nos sintamos contentos, al sonreír, podemos segregar las sustancias suficientes para sentirnos realmente contentos.

Por lo tanto, qué pensar, y qué sentir, es una decisión de cada día. Esta decisión puede tener un efecto en qué acciones tomaremos en el día. Y por consecuencia, qué vida construiremos.

Advertisement

5 La magia de ser co-creadores de la realidad

Solemos pensar que la vida ocurre. En efecto, hay mucho de la vida en lo que no tenemos control. Sin embargo, hay una gran parte de la vida en la que podemos adueñarnos para ser co-creadores. Crear una vida para nosotros mismos. Generar relaciones que tengan un efecto agradable para los demás y para ti.

Es un reto, y a la vez, una gran responsabilidad. Poder saber que tú eres parte de la vida, y del tejido de la humanidad. Qué eres parte de lo que genera el problema, o que puede llevarnos a la solución. Poder asumir la parte que te toca, y vivirlo con toda la grandeza que implica, con el sentido de que la vida permanezca, y mejore sus condiciones. Tal vez ya no para ti, sino especialmente para las generaciones venideras. Esa, es la creación más hermosa. Ese, es uno de los regalos de estar vivo. Damos vida.

Que en este tiempo puedas mirar hacia adentro, y encontrar tu manera de nombrar la realidad. Que logres descubrir nuevas maneras, nuevos nombres, nuevas cosas a las cuales ponerle nombre. Que a partir de esta nueva manera de pensar, y de trabajar con el lenguaje, te reinventes. Que en esta nueva invención, puedas generar más vida.

Toma un momento para compartir ...

Danitza Covarrubias

Danitza es originaria de Guadalajara, Jalisco, en México. Licenciada en psicología y maestra en desarrollo transgeneracional sistémico, con certificación en psicología positiva, así como estudios en desarrollo humano, transpersonal y relacional. Psicoterapeuta, docente, escritora y madre de 3. Firme creyente que esta profesión es un estilo de vida.